Ley de emergencia: “Mientras ibamos haciendo las correcciones se veia la desprolijidad de cortar y pegar”, reveló Acosta

“Sabía desde un primer momento que las cosas tenían cierto grado de desprolijidad e inconsistencia y que comunicándonos directamente con el Ejecutivo provincial nos íbamos a poner de acuerdo enseguida”, dijo, teniendo en cuenta el acercamiento de este jueves de Melella en la reunión con los 15 legisladores.

“Masticamos mucha bronca previo a la asunción, porque el gobierno que se fue dictó más de 300 decretos después de perder las elecciones, no pagó a proveedores, repartió dinero antes de la entrega del mando a las intendencias, hizo el pago por el famoso Casino de 124 millones, cuando la primera cuota era para para en marzo pero la gobernadora lo hizo dos días antes de su jura como diputada. Quedó un hermoso choclo de deuda pública de 6.400 millones y creo que la ansiedad hizo que se cometieran muchas desprolijidades”, argumentó.

“En 48 horas estuvimos pegados a la silla los cuatro legisladores del bloque con nuestros abogados, analizando una cantidad de cosas. Mientras íbamos haciendo las correcciones, se veía la desprolijidad de cortar y pegar. Ni hablar de cuando entra el proyecto definitivo, porque no estábamos al tanto de otros anexos que iban a ir a la par de la ley de emergencia, como la ley de puerto, la de INFUETUR. Son todas cosas necesarias y nadie dice que no hay que discutirlas, pero con 48 horas no daban los tiempos”, sostuvo.

“Fuimos viendo el tenor de las contradicciones que se generaban, y tenemos que decir que hay cuestiones de forma, otras de fondo y otras que son políticas. Por ejemplo, escuché a todos los actores al otro día del ingreso del proyecto, y no toda la ley es mala. Hay cosas que corregir ineludiblemente pero los primeros que no íbamos a votar algo que interfiriera con los intereses de los trabajadores íbamos a ser nosotros. Por eso me llamó la atención la agitación que se generó”, dijo.

“A la gente le trae muy malos recuerdos cada vez que se habla de emergencia, y esos títulos siempre han sido utilizados para meterle la mano al bolsillo a los trabajadores y hacerles daño”, advirtió.

Dio cuenta de la buena voluntad de los bloques de oposición y los puntos de consenso. “Laura Colazo vino a verme, me dijo cuál era su sensación del proyecto y qué pensaba, y nos dimos cuenta de que teníamos más acuerdos que diferencias. No tenemos premura por definir algo ya y nos podemos dar un plazo. También coincidí con observaciones que hizo Federico Sciurano al tema del puerto y el INFUETUR. Me di cuenta de que con algunos actores no va a ser tan difícil de construir consensos”, manifestó.

Desglosó varios artículos polémicos, como “el artículo 3, que habla de las facultades del Ejecutivo, que generó mucho debate porque dicen que hay una concentración del poder público. El gobernador lo retiró de la discusión. El artículo 8 habla de la certificación de deudas de los municipios con previa fiscalización del Tribunal de Cuentas, que también hizo mucho ruido, y el gobernador también lo sacó. El artículo 9 se retiró, aunque para mí debía defenderse, porque autorizaba a revisar o anular convenios de asistencia financiera no reintegrable a los municipios, organismos autárquicos, entre otros. Para mí ese artículo es fundamental, porque los que venimos del sector privado sabemos que cuando nos otorgan un subsidio no reintegrable lo tenemos que fundamentar. Está muy bien que el Estado decida otorgar un subsidio al municipio pero tiene que decir la afectación, y no puede haber municipios de primera y segunda clase, donde se favorezcan a algunos y otros no tengan esa posibilidad. Ahí no se están reflejando las autonomías municipales, que hemos defendido siempre. Hay otro artículo que nos impactó de lleno y hubo críticas absolutamente reales. Nos angustió mucho el artículo 25, que habla de lo previsional. Era innecesario ponerlo, porque el Ejecutivo tiene facultades para hacer una cantidad de cosas sin ponerlas en una ley. Si vamos a ir a una modificación del sistema previsional, lo primero que le vamos a pedir al gobernador es que escuche a los electos democráticamente por los propios trabajadores estatales. Esto es con todos, y los de abajo son los primeros que tienen que emerger para construir el sostenimiento de la gobernabilidad”, enfatizó.

Aclaró que “nosotros no estamos acá para quedar bien ni con el oficialismo ni con los que se fueron. Estamos para no defraudar los intereses de nuestros compañeros. Esto fue absolutamente a las apuradas, desprolijo. Estuvimos en las reuniones previas para ver las reformas que pretendía el Estado y esta premura con que se hizo todo se notó en el proyecto de ley. Había artículos repetidos y las reformulaciones que se hicieron entraron a último momento. El gobernador se hizo cargo porque es humilde, reconoció en cabeza de él el error, pidió disculpas y vamos a hacer las cosas como corresponde, no bajo presión. Es loable, porque en otras épocas te llevaban puesto y nadie leía nada. Era subordinación y aplicar la mayoría automática”, comparó.

“Me parece que esta sucesión de errores tampoco puede ser el tentempié de los que pretenden desestabilizar, porque eso también uno lo ve. La pluralidad de sectores en la Cámara hace que tengamos que discutirlo todo, y bienvenido que así sea. No creo que vuelva a suceder que nos pidan sesionar en 24 ó 48 horas. Eso fue lo primero que hizo un click y para el arranque fue toda una definición”, observó.

Respecto de lo que queda por delante antes de la sesión del 27, dijo que “ahora se va a tratar capítulo por capítulo, y me parece muy importante. Estamos recibiendo aportes y el Ejecutivo nos hizo saber que se va a reunir con sectores gremiales, con la CGT, con los electos de la caja. No es cuestión de elegir lo más rápido. Hay que tomarse el trabajo de hacerle saber al otro para dónde vamos, y de esa manera vamos a tener mayor defensa de cada medida que queramos implementar”, concluyó. 

FUENTE: sur54