El ex concejal radical de Rio Grande y ex funcionario del intendente Melella, cuestionó el paquete de leyes y sostuvo que “no se trata de una emergencia económica, sino administrativa”. Aseguró que “potencia el déficit y acelera el gasto”, y ademas que hay “un aumento de la planta de funcionarios”.
Por Radio Provincia marcó diferencias con la ley de emergencia que se aprobó a nivel nacional “donde hay un aumento de los tributos. Acá no hay ninguna herramienta que achique el déficit, por el contrario, lo potencia, dado que lo que genera es que el Estado tenga mayor celeridad al momento del gasto público”, dijo.
“Uno entiende el contexto nacional y provincial que se vive en lo económico, pero cuando se hace un detalle y un análisis de las leyes presentadas, la conclusión que uno puede llegar es que no se trata de una emergencia económica, sino de una emergencia administrativa. No tiene nada que ver con la ley nacional, dado que a nivel nacional se genera un mayor ingreso al Estado a través de un aumento de los tributos, cambia la composición del gasto, pero acá no hay ninguna herramienta que achique el déficit, por el contrario, lo potencia, dado que lo que genera es que el Estado gaste más rápido y que se tenga mayor celeridad al momento del gasto público”, criticó.
“Las únicas tres medidas económicas que hemos visto en estos últimos días son el bono extraordinario de casi cien millones de pesos, el aumento de la planta política y del sueldo de los funcionarios”, fustigó.
Cargó contra “la delegación de facultades” y la “concentración de los tres poderes del Estado dentro del Ministerio de Finanzas, dado que le da al Ejecutivo la posibilidad de legislar, imposibilita al Poder Judicial que las sentencias puedan ser cobradas por las personas que hayan generado juicios contra el Estado. Es una herramienta bastante llamativa, porque no es habitual que se genere una concentración de esta manera, que además va a acelerar el gasto público, y no va a achicar el déficit fiscal”, reiteró.
“Ninguna de las herramientas planteadas tiende a achicar el déficit fiscal. Lo único que hace es dar discrecionalidad para contratar directamente cualquier servicio, o bien del Estado, o una licitación con plazos sumamente acotados de seis días entre la publicación y la apertura de sobres, y no genera ninguna herramienta que mejore las cuentas del Estado o que achique el gasto”, expresó.
“En caso de que prosperen estos proyectos del ley, el paso que sigue si no alcanza el presupuesto es congelar los salarios o aumentar los impuestos”, advirtió. “Esto es sumar y restar y no hay mayores salidas”, sentenció.
FUENTE: sur54